En la tabla de posiciones del rock & pop, Muse es uno de esos grupos que sube lugares a ritmo de campeonato: la banda inglesa se convirtió en una de las más convocantes de Europa y, aunque el bajista Christoph Wolstenholme recién sienta un leve triunfo en suelo norteamericano, en la tierra de Obama también mueven gente. Como ejemplo, sirve el próximo festival Coachella (abril, en California). Junto a Jay-Z y Gorillaz, son la principal atracción de los tres días. Incluso, Muse aparece en el line-up por encima de Faith No More, Tiësto o David Guetta.
-Christoph, ¿qué les genera tener tanto reconocimiento?
-Es genial. En los Estados Unidos, nuestro primer álbum no vendió muy bien y el segundo directamente no salió. Eso hace que pegarla haya sido muy difícil porque somos una banda que crece en todos lados menos allá. Eso nos frustra. Absolution (2003) fue el primer álbum que pegó en EE.UU. Es genial estar ahora estar tan arriba en los line up porque era un objetivo que queríamos lograr.
-¿Van a volver a la Argentina?
-Estoy seguro de que iremos, pero no tenemos nada programado por ahora. Queremos hacer el tour hasta agosto del 2011. Eso nos da tiempo a fin de este año o principios del otro para pasar por allá. Seguramente hagamos el verano europeo y después viajemos a Estados Unidos. Luego tenemos muchos lugares en los que queremos tocar, como Sudamérica o Sudáfrica.
Filtrado en la Web días antes de su lanzamiento oficial, The Resistance fue el primer CD de Muse en estudio después de tres años (H.A.A.R.P. se grabó en vivo) y es una suerte de Caja de Pandora sonora de la banda.
-En una entrevista, el cantante Matt Bellamy dijo que el futuro de la banda puede estar en "Undisclosed Desires". Es el tema más pop de ustedes, ¿hacia ese sonido se dirigen?
-Puede ser una posibilidad hacer cosas más electrónicas. De todas formas, no creo que editemos un álbum entero de eso. Fue la primera vez que compusimos algo así. Cuando cambiás de estilo tomás un riesgo porque puede pasar que a los fans no les guste...
-¿Y en esa búsqueda de sonido, ¿en qué categoría cae Muse?
-Es muy complicado encontrar palabras que describan Undisclosed Desires y Exogenesis. Somos una banda que intenta expandirse en cuanto al sonido. Creo que somos esencialmente un grupo de rock, pero no de manera tradicional en el sentido en que no encajamos en una sola categoría. Estamos muy abiertos a distintos ritmos. Con respecto al futuro, puede ser que nos volvamos más electrónicos.
-Matt es el principal compositor, ¿hay alguna canción en la que se pueda notar tu mano?
-Es muy difícil de decir. Matt siempre trae las ideas y encuentra inspiración en lo que lo rodea, pero cada tema tiene mucho trabajo nuestro. Undisclosed Desires salió de zapar y tratar un montón de ideas.
-A Muse se le reconocen sus poderosas presentaciones en vivo. ¿Alguna vez consideraron grabar en una sola toma?
-Algunas veces lo hacemos así. Siempre fuimos fans de capturar una actuación en vivo. Cuando entramos a un estudio lo hacemos juntos y tocamos lo más fuerte posible. Por supuesto, luego vienen un montón de cosas que se le agregan a la canción, pero creo que en la esencia está eso.
-En "Uprising" hablan de las drogas. ¿Cuál es la postura de la banda frente al tema?
-No juzgo a los que consumen. Conozco gente que lo hace como recreación sin que se le convierta en una adicción y conozco a otros a los que se le va la mano. He probado en el pasado y los otros chicos también. Ahora llevo tiempo sin hacerlo. Sólo digo que hay que tener cuidado.
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